sábado, 19 de mayo de 2007

EL ROSTRO DE LA SOLEDAD


Esos ojos me miran. No, no a mí, ni a ti, ni a nadie. Esa mirada perdida en el infinito busca protección, pide ayuda, grita ¡quiero vivir! Hoy he visto el rostro de la soledad, del desconsuelo, del miedo. No es fácil renunciar a una estrella cuando la estás tocando con la yema de los dedos.

Esos ojos no gritan, piden socorro en silencio. Buscan una salida que les conduzca a otra realidad. No quieren volver al tedio y a la miseria. Aspiran a encontrar en otro mundo lo que desde la cuna se les ha negado. Una manta a veces es suficiente para cambiar el calor del hogar por la tranquilidad de una vida digna. Sobrevivir en medio de una fuerte tormenta en medio del mar es muy difícil. Llegar a la orilla para dejar tu pasado atrás, es una quimera.

No hay lágrimas, ni gritos, no hay gestos de dolor. Sólo una mirada brillante que no quiere renunciar al paraíso que ha visto tan cerca. Muchos han quedado en el camino, a otros les faltó un último aliento para impulsar su barca hasta el final. Por todos ellos, nunca se rendirá.

Recrearse en el pasado es tentador, pero los anhelos y los sueños no sacian el hambre ni cierran las heridas. El futuro te espera y la vida a veces te da una segunda oportunidad. Mirar hacia delante y luchar por la dignidad es la mejor medicina para remendar los rotos del alma.


3 comentarios:

Lady Miau dijo...

Y la literata que dormitaba en el Pescadito decidió despertar y deleitar al resto de mortales con sus pensamientos (gracias por hacerlo).

Sé de alguien que "gozaría" leyéndote (literal). Besito

Melpómene dijo...

A veces en la oscuridad veo esos ojos... esa maldita soledad que me deja sin aliento cada vez que siento rechinar los muebles viejos y espero... y sigo sola... y ¡nadie me friega!... ¡Vale! no puedo ser tan "rara" como tú, ¿qué quieres?

Anónimo dijo...

Ya sabes que este artículo me gusta mucho, pero aún me gusta más con la foto que has puesto. La verdad es que está mejor que la que me mandaste escanear, así que te perdono que me hayas hecho perder el tiempo, jeje.